En el mes de febrero, la planeación de actividades de las educadoras del Centro San José de la CSP, en México, incluye actividades para aprender sobre la importancia de la amistad, y trabajar sobre el desarrollo de las relaciones sociales entre los niños.
Actualmente atendemos a diario a 110 niños de 2 a 6 años. En esta edad, es habitual presenciar a diario conflictos entre ellos, ya que se pelean por todo tipo de motivos: por un juguete o por cualquier objeto que creen que es solo suyo, porque algún amigo no quiera jugar con ellos, para ganar el primer lugar en la fila, porque un compañero le hizo una “cara fea”, o “le sacó la lengua”, lo empujó, etc.
Estas peleas son normales en los niños a esta edad, que muchas veces se defienden pegando o llorando de frustración. Algunos prefieren ir a pedir auxilio a las maestras, quienes les repiten cada vez que las manos sirven para acariciar y no para pegar, pero en estos momentos, cada uno resuelve sus problemas como puede.
En la convivencia diaria con los niños en el Centro San José, las maestras están la mayor parte del día resolviendo conflictos y malentendidos. Como en otros años, el mes de febrero lo dedicaron en trabajar sobre la importancia de la amistad, para fomentar el cariño hacia sus compañeros. En el desarrollo social y personal de los niños, los padres de familia también tienen una gran responsabilidad con sus hijos sobre estas situaciones, y es importante que sepan darles consejos de lo que deben hacer si se les presentan estos tipos de conflictos con sus compañeros.
En esta ocasión, el 14 de febrero, día de San Valentín, conocido también como en día del amor y amistad, las educadoras junto con los niños prepararon una actividad como muestra de aprecio y cariño para hacías sus compañeros: todos trajeron un regalito para intercambiar entre sus compañeros. Fue una actividad muy emotiva, llena de detalles y de abrazos entre ellos.
Queremos seguir promoviendo la amistad entre los niños y niñas del Centro San José, en esta edad en la que aprenden a respetarse, a pedir perdón, y a tratar bien a sus amigos y amigas, para valorarlos como un tesoro en sus vidas.